Mona Lisa
Su edad excede la de las rocas
Entre las cuales reposa;
Como el vampiro,
Ha muerto muchas veces,
Y ha aprendido los secretos de la tumba;
Y ha buceado en las profundidades marinas,
Y conserva en torno suyo aquel ocaso;
Y ha negociado tramas preciosas
Con mercaderes orientales;
Y, como Leda,
Dio luz a Helena de Troya,
Y, como Santa Ana,
Fue la madre de María
Y todo esto ha sido para ella tal
el son de liras y flautas
Y vive
Sólo en la delicadeza
con que ha modelado los cambiantes rasgos,
Y matizado los parpados y las manos.